Las 35 personas con discapacidad intelectual usuarias del centro ocupacional del Fundación Instituto para la Integración Social de Fundación Dfa pueden disfrutar desde este martes de cinco gafas de realidad virtual. La adquisición de este nuevo sistema interactivo les permitirá simular situaciones desconocidas donde desarrollar y entrenar habilidades que promuevan la autonomía personal y la inclusión social en la vida real.

La implementación de este proyecto se produce tras la concesión recibida dentro de la III Línea de Ayuda de Fundación Redexis, para el apoyo de iniciativas que promuevan la mejora de la calidad de vida y la independencia de las personas con discapacidad, en especial durante la infancia y juventud.

La presidenta de Fundación Dfa, Marta Valencia, ha señalado que «con esta tecnología vamos a conseguir que muchos de nuestros usuarios y usuarias puedan acceder a experiencias que es posible que no disfruten en la vida real. De esta forma, podrán viajar a lugares desconocidos, sumergirse en experiencias relajantes o disfrutar de juegos educativos». Más allá del componente de ocio, Pilar Pérez, directora del área de Centros Asistenciales de la entidad, ha valorado que «la rehabilitación tanto cognitiva como motora puede apoyarse en terapias de realidad virtual como un complemento terapéutico eficaz».

«La rehabilitación tanto cognitiva como motora puede apoyarse en terapias de realidad virtual como un complemento terapéutico eficaz»

También ha estado presente Fernando Salvador, director regional de Redexis en Aragón, quien ha manifestado que «para nosotros es una satisfacción total poder llegar y ayudar a personas con discapacidad».

Los usuarios del Centro Ocupacional de Fundación Dfa han podido disfrutar de algunas de las experiencias interactivas que ofrece esta tecnología seleccionada por la consultora aragonesa Integra. «¡Ha sido alucinante!», comentaba Carmen, una de las primeras usuarias en probar los dispositivos, después de completar un recorrido en una montaña rusa.

A partir de ahora, el equipo profesional del centro ocupacional implantará talleres de realidad virtual. Para que estos talleres sirvan de referente como iniciativa innovadora y tengan un efecto multiplicador, una vez que técnicos y usuarios del centro manejen las gafas de realidad virtual, serán ellos mismos quienes se encarguen de trasladar la información, tanto del manejo como de sus beneficios, a las personas que viven en la residencia Rey Fernando de Aragón. En definitiva, se prevé que al menos 280 personas se beneficien de su uso.

En los últimos años se ha demostrado la efectividad que tiene la realidad virtual en patologías como fobias o depresión o para reducir la ansiedad. La mejora de la calidad de vida es posible, ya que permite tener experiencias inmersivas en muchos campos (turismo, ocio, aprendizaje y formación). Además, ayuda a estimular la interacción de la persona, que adquiere el control de ese mundo virtual.